Audios de Wilmer Mejía, director del DNI, sacuden al gobierno y comprometen aún más a la entidad en un presunto entramado de presiones militares. En la conversación, el funcionario es presuntamente escuchado presionando a miembros de las Fuerzas Militares de #Colombia para que entreguen información sensible sobre oficiales activos, retirados y supuestos seguimientos al Presidente #GustavoPetro.Este escándalo se suma al contexto del polémico Caso #Calarcá. Mejía habría utilizado su posición no solo para obtener información, sino para condicionar el futuro de uniformados: ascensos, retiros y traslados estarían supeditados a los "resultados" de esta recolección de inteligencia, decisiones que antes pasaban por la Junta de Generales.La información sugiere que el objetivo de esta maniobra podría ser crear una "cortina de humo" para aliviar la presión sobre el presidente, en lo que un audio menciona como la "posibilidad de salvar al presidente...".La situación ha generado una profunda inconformidad en las diferentes fuerzas militares y la policía, quienes ven un cambio en la dinámica tradicional de ascensos y retiros. El papel de la Dirección Nacional de Inteligencia se ha transformado en el principal juez del futuro de los uniformados.El Director de la DNI reaccionó negando que la voz sea la de Mejía. Sin embargo, el contenido de la conversación destapa un oscuro esquema que podría tener graves consecuencias para la seguridad nacional y la institucionalidad.