En esta sesión hablamos de la importancia de mantenernos creciendo espiritualmente y de tener espíritu enseñable, de manera que recibamos la corrección de parte del Espíritu Santo cuando nos rebele áreas en las que necesitamos trabajar.

En esta sesión hablamos del primer valor fundamental de Owasso First Assembly el cual es la Adoración a Dios y cómo podemos vivir una vida de adoración y obediencia a Dios.

En esta sesión analizamos los capítulos 14 al 16 de Romanos. Hablamos de la importancia de la unidad en el cuerpo de Cristo y cómo debemos trabajar en construir y unificar en lugar de destruir y dividir la iglesia.

En esta sesión Hablamos de la importancia de la humildad en nuestra vida. Hablamos de nuestra relación con Dios, con la iglesia y con todas las demás personas. Hablamos también de honrar y obedecer a nuestras autoridades terrenales.

En esta sesión hablamos de la predestinación divina, lo cual significa que Dios ensancha Su gloria y misericordia para aquellos que no la merecen. Hablamos también de la responsabilidad de los creyentes de llevar a otros la gracia de Dios.

En esta sesión hablamos de la diferencia entre vivir en nuestra naturaleza pecaminosa y vivir en el Espiritu. Basado en Romanos 7 y 8 comparamos la vida en el mundo con la vida en Cristo y cómo la fe en el sacrificio de Jesús nos llevo a ser adoptados a la familia De Dios y pasamos de no tener esperanza y estar sentenciados a muerte a tener una esperanza gloriosa en Cristo y a tener vida eterna.

En esta sesión hablamos de ejemplos como Abraham y David, quienes fueron justificados por su fe. También hablamos de cómo la fe en el sacrificio de Jesús nos justifica ante el Padre, haciéndonos limpios y sin pecado ante Él.

En esta sesión hablamos de la realidad expresada en el libro de romanos, la cual muestra cómo el pecado nos había separado completamente de Dios y cómo la misma separación nos causa ahondar más en el pecado. Habla también de cómo el pecado nos traía la muerte y cómo nadie logró cumplir la ley, sino que todos merecíamos la consecuencia del pecado, la cual es la muerte. PERO DIOS envió a Su Hijo Jesucristo a morir por nosotros y cambio nuestra esclavitud del pecado y su consecuencia por vida eterna.